Breves apuntes sobre el papel de las universidades en la formación ética de los futuros profesionales del Derecho
| Author | María Teresa Benito Menéndez |
| Position | Labora en la ONBC |
| Pages | 79-82 |
RPNS 0491 ISSN 2308-2240
No. 61 enero-junio 2019
www.revista.onbc.cu 79
Breves apuntes sobre el papel de las universidades
en la formación ética de los futuros profesionales del Derecho
Brief notes on the role of universities in the ethical training
of future legal professionals
M.S. M T B M
Labora en la ONBC
ORCID ID: 0000-0003-4238-1035
maria.benito@jdn.onbc.cu
RESUMEN
El trabajo en modalidad de artículo refiere ideas claves
acerca de la ética en las universidades y específicamente
en la carrera de Derecho. Aunque hace referencia a Cuba,
sin dudas recrea una panorámica presente en las univer-
sidades del mundo. El derecho a la educación y de esta a
la educación en valores, con respeto a la ética, constituye
el objetivo fundamental.
Palabras clave: Ética, universidad, profesor, alumno, código.
ABSTRACT
The work in article mode refers to key ideas about
ethics in universities and specifically in the career of
Law. Although it refers to Cuba, it undoubtedly recrea-
tes a panoramic view of the universities of the world.
The right to education and the right to education in
values, with respect to ethics, constitutes the funda-
mental objective.
Key words: Ethics, university, teacher, student, code.
Introducción
«Los estudiantes que son el baluarte de la
libertad y su ejército más rme, las universidades
parecen inútiles, pero de allí salen los mártires y los
apóstoles».
José Martí1
Llegar a la universidad, ser parte de su alumnado,
constituye una meta que en Cuba se hace realidad sin
discriminación por razones de sexo, género, orienta-
ción sexual, identidad de género, edad, origen étnico,
color de la piel, creencia religiosa, discapacidad, origen
nacional o territorial, o cualquier otra condición o cir-
cunstancia personal que implique distinción lesiva a la
dignidad humana, sin afectaciones económicas por
ser gratis (MINJUS, 2019).
Las diferentes modalidades de estudios que transi-
tan desde el curso regular diurno,2 educación a dis-
tancia3 o libre y curso por encuentro,4 dan acceso a
personas de diferentes edades, algunos no tan jóve-
nes con deseos y voluntad de acceder a estos cono-
cimientos,5 y en este escenario confluyen otros tipos
de alumnos, desiguales miradas hacia lo externo e
interno, y de comportamientos. Sin embargo un es-
labón común, además del estudio para alcanzar la
meta, es la conducta ética.6
La realidad de las aulas en el siglo XXI no es la mis-
ma que en el XX, siglo en el que no pocos profeso-
res actuales estudiaron y se graduaron. Correspon-
de entonces una mirada que abarque adaptación al
cambio, a lo nuevo, sin perder el sentido del actuar
ante normas que rijan lo justo, lo bueno, lo acer-
tado, conforme a la ética.Cabe señalar a José Mar-
tí cuando dijo en 1883 «Como quien se quita una
mano y se pone otro, es necesario poner de lado
la Universidad antigua y alzar la nueva»7 (Valdez
Galarraga, 2001).
El reto de las universidades cubanas es grande,
porque se trata no solo de instruir, de dar cono-
cimiento, sino de educar, de formar y allí está la
cívica.8 En Cuba es muy recurrida la memorable
frase de José de La Luz y Caballero, pedagogo y
filósofo cubano nacido en 1800 en La Habana que
legó el camino a los educadores: «Instruir puede
cualquiera, enseñar solo aquel que sea un evange-
lio vivo».9
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